Quisiera romper las cadenas
que me atan a la falsedad.
Destruir las rejas que me encarcelan
al vacío y la soledad.
Y con una bomba nuclear
estallar aquella jaula  que me aprisiona
con aquel que finje ser yo.
Me corta la respiración,
poco a poco,dejándome ciega
por las presiones y espectativas;
dejándome en un laberinto
de frustraciones sin principio
ni fin.
¡Autodestrucción total!
Recurro a las sustancias que me dejan vivr,
pero me matan ... lentamente ...
pudriendo mi alma
ante la desilusión de saber quién soy.
Me fastidian los engaños,
como la rosa y los payasos,
los dueños de promesas sin cumplir.
Encerrada por siempre en este cuarto oscuro
resulta ser un abismo rumbo a la locura.
Me clavan contra las paredes
arrestándome de por vida,
con cadenas oxidadas y pisos sangrientos.
Ni la paloma de paz reconoce el camino.
El águila de la libertad se pierde
en esta encrucijada de saber quién soy.
Mi eterna cruz: lo que ya esté perdido.
Lágrimas desbordan los ríos
al reconocer quién soy ...
         tú.